Una de las principales preocupaciones de los inquilinos y propietarios es lograr mantener el confort en sus hogares. Con una pequeña inversión y una mínima reforma es posible mantener la temperatura deseada todo el año, logrando ahorrar dinero en las facturas y siendo más respetuosos con el medio ambiente.
«La energía que se pierde en nuestros hogares no se ve, por eso no somos conscientes del despilfarro energético que se produce en los edificios por la falta de aislamiento» según La Casa que Ahorra, ya que se ha demostrado que el aislamiento es el método más efectivo para evitarlo.
Antes de sustituir la caldera o los aparatos de aire acondicionado recomiendan revisar el aislamiento de las viviendas, casi siempre desconocido para los propietarios, ya que sin el aislamiento adecuado es posible que cambiar los aparatos no logre mejora alguna.
Para respaldar estas iniciativas de ahorro energético, desde el 1 de junio de 2013, tanto para alquilar como para vender las casas, es necesario tener la Etiqueta de Certificación Energética de Edificios (ce), creada para saber el consumo energético y las emisiones de CO2 de cada vivienda.
La etiqueta informa del consumo de energía de las viviendas, así los inquilinos pueden saber cuánto consumen, cuánto contaminan y si las facturas serán mayores por el consumo. También incluye las posibles mejoras en términos energéticos, como mejorar el sistema de aislamiento que en la mayoría de casos es determinante.
Existe un novedoso sistema de aislamiento como solución a todos estos problemas: con bajo coste, sin obras y que los resultados se aprecian desde el primer día: SUPAFIL.
Supafil es una lana mineral respetuosa con el medio ambiente, que se inyecta en la fachada para aislar la casa y reducir el consumo energético. La inversión es muy asequible y se recupera en poco tiempo porque el coste de las facturas empieza a descender considerablemente.
La instalación se puede realizar en un día sin modificar la fachada ni tener que desalojar la vivienda ya que sólo es necesario realizar pequeños orificios que después se tapan sin dejar rastro de la intervención. Puede hacerlo cada vecino en su casa o la comunidad de propietarios conjuntamente.
Josep Plaza, interiorista del Estudio Plaza Disseny en Barcelona, solicitó un examen de su vivienda totalmente gratuito. En un día y sin necesidad de obras, ni de abandonar su casa, los instaladores oficiales de Supafil inyectaron el aislamiento en su casa, «Ya he notado con respecto al año anterior una temperatura más confortable, al igual que los ruidos del exterior que han disminuido notablemente, seguro que la apreciación será mayor según avance la temporada de invierno» explica Josep.